El mantenimiento preventivo dentro del hardware se le puede dar a lo
siguiente tarjeta madre, memoria RAM, gabinete, disco duro, procesador,
micro, unidad de CD ROM, disipador, fuente de poder, tarjeta de video,
tarjeta de sonido, tarjeta de red, teclado, mouse, impresora, scanner,
lector de tarjetas, unidad de disquete, ventilador, bocinas, monitor,
etc.
Se utilizan varias herramientas para dar mantenimiento preventivo al
hardware como lo son la pasta térmica: que se utiliza para conducir el
calor entre el micro y el disipador, aire comprimido: para quitar el
polvo a los componentes, alcohol hisopropílico: para limpiar componentes
electrónicos (circuitos), multimetro: para medir el voltaje, cautín:
para soldar, elector plus dieléctrico: para limpiar circuitos y que no
agá corto, borrador de migajón: para limpiar los contactos de la memoria
RAM, brocha: para limpiar el polvo restante, aspiradora: para
sopletear, herramientas: para quitar tornillos etc.…
Por ultimo al no darle mantenimiento a un equipo este puede provocar la
acumulación de polvo el cual produce daño en la unidad lectora de laser,
este se acumula produciendo una capa que impide la ventilación y esta
produce que el equipo se caliente y puede llegar al grado de quemarse,
por otro lado contiene el polvo contiene elementos conductores que
pueden generar corto circuito.
Debemos de tratar de no tener nuestro equipo de cómputo en lugares
húmedos ya que la humedad corroe los circuitos, los sulfata y no produce
apropiadamente la corriente y estos son daños irreversibles.
MANTENIMIENTO
DEL DISCO DURO
El disco
duro es uno de los componentes de nuestra computadora
(ordenador, PC) más sensibles y por ello requiere
cuidado y mantenimiento para mantenerlo siempre funcionando como nuevo.
Es recomendable que el espacio libre de un disco duro no debe ser
inferior al 10% de su capacidad total, y cuando se llega a este límite
es necesario borrar archivos innecesarios, desinstalar programas que no
se usen, comprimir archivos o en ultima instancia comprar un disco duro
de mayor capacidad.
Como en muchos
aspectos, la prevención es la mejor arma para evitar posteriormente
fallos o incluso pérdida de información. Algunos de estos fallos se
muestran a continuación:
1. Poco espacio
disponible (a menudo como consecuencia de archivos innecesarios)
2. Espacio del disco asignado a dos o más archivos,
conocido como "direccionamiento cruzado de archivos"
3. Cadenas o clusters perdidos, es decir: espacio
ocupado en el disco (aparentemente) pero no asociado a ningún archivo o
carpeta.
4. Copias 1 y 2 no coincidentes
de la FAT, es decir dos copias idénticas de la FAT (File Allocation
Table) que se mantienen en el disco duro como medida de seguridad pero
que se detecta que no coinciden, lo que provoca que se emita un mensaje
de alarma.
5. Sectores alterados o
dañados:
a) Sector de arranque alterado o
dañado (por virus, cortes de energía abruptos, descargas eléctricas, por
la edad del disco).
b) Sectores
físicamente dañados (por ejemplo por envejecimiento, exceso de humedad,
calor, etc., uso abusivo prolongado, fallo súbito de energía, golpes).
6. Alto porcentaje de fragmentación, esto se puede
corregir facilmente siguiendo el articulo